En Latinoamérica el norte de México también experimenta altos grados de violencia y criminalidad. El problema se agrava cuando la corrupción y el abuso de poder penetra las esferas policiales. Pero en la ciudad de Tamaulipas un grupo de mujeres se ha propuesto honrar a sus autoridades por medio de la oración.

Toda sociedad organizada, cuenta con organismos como el ejército o la policía, para mantener el orden y la seguridad de su ciudadanía. El respeto a la autoridad es un principio bíblico, pero en muchos países la imagen de estos servidores públicos se ve afectada por problemas de corrupción y abuso de poder. Sin embargo, en el norte de México un grupo de mujeres se ha propuesto restaurar esta imagen, honrando a sus autoridades por medio de la oración.

El estado de Tamaulipas en el norte de México, es uno de los más activos en la guerra contra la delincuencia y el narcotráfico. La población está habituada a las noticias de asesinatos y desapariciones de gente relacionada con el crimen organizado.

La gente confía poco en la policía local y ellos y sus familias están concientes del rechazo.

"Uno aquí nunca espera nada de toda la ciudad, como quien dice nadie nos quiere”, dice Marcos Lerma oficial de policía.

Pero en la iglesia Palabra de Vida, la pastora misionera Linn Crow y su equipo de oración, están trayendo esperanza a estos policías y a sus familias por medio de un ministerio llamado "Honrando a la Autoridad".

"Hace como 15 años, un día orando, el Señor puso en mi corazón un plan para orar por los policías de esta ciudad, me dijo 'yo quiero impactar las familias de los policías'. Estas familias cargan con conflictos en sus vidas, por temores y el estrés que cae en los policías", explica la pastora.

Por 12 años la pastora Linn se dedicó a orar por el equipo de personas que realizaría esta labor. La espera terminó cuando Mary Castillo recibió con gusto la responsabilidad de llevar el evangelio a los policías.

"El ministerio honrando a la autoridad, consiste en buscar mujeres de la iglesia que ya tengan tiempo y sepan orar para que así oren por las familias de los oficiales. El propósito es primeramente enseñarles a los oficiales la palabra, darles del amor de Dios de la protección de Dios y que el desea ayudarlos”.

Para Anabel Ramírez, voluntaria del ministerio, orar por estas familias está cambiando a su ciudad. "La palabra de Dios dice que oremos por ellos para que vivamos quieta y reposadamente y para que Dios les de sabiduría para poder gobernar la nación, el pueblo o la localidad donde estamos. Por medio de este ministerio podemos levantar las autoridades en oración a las familias, que las familias de los oficiales sean salvas, que conozcan a Cristo como su Salvador y también como su protector su ayudador y su proveedor de todo".

El oficial Marcos Lerma y su familia, reconocen que las oraciones de estas mujeres le dan una protección sobrenatural.

"Se siente uno más a gusto y protegido. Cuando ve uno los problemas como quiera piensa uno en lo que nos dice la señora, la hermana que hay alguien que nos esta protegiendo".

Norah Nieto es la esposa de Marcos y afirma que este ministerio se preocupan mucho por ellos y les envían muchas bendiciones. “Oran mucho por ellos para que me le vaya bien y gracias a Dios ahorita no les ha pasado nada, el chocó ya una vez, la patruya quedó abajo de un poste con electricidad y todo eso gracias a Dios no le paso nada, la máquina quedo inservible y el mírelo ahí esta".

Para las gemelas y esposas de oficiales Isabel y Maribel Rodríguez, los grupos de oración se convirtieron en estudios bíblicos donde sus esposos han sido transformados y los milagros comenzaron a llegar.

"Es mejor padre, antes no le ponía mucha atención a la niña mayor ahora es muy cariñoso con las niñas. Antes era puro pelear, ahora ya no", testifica Maribel Ramírez, esposa de un policía.

Según Isabel Rodríguez, esposa de otro policía, desde que las hermanas empezaron a venir, ellas tomaban la palabra y oraban. “Después mi esposo se empezó a acercar y siempre le decían ten fe y mira échale ganas y sembraron la semilla en ellos, y cada que viene dicen ahí vienen las hermanas".

"Yo noté cambios desde que ellos comenzaron a venir a nuestra casa. Ya vamos un poco más seguros al trabajo, porque ellos me han dicho que han orado por nosotros al andar en la patrulla anteriormente uno andaba con miedo y hoy me siento más seguro”, afirma Víctor Hugo Domínguez, quien es policía.

En el ministerio de policías son 60 familias aproximadamente a las cuales se les está impartiendo la palabra de Dios. “Se tocan a más familias porque una familia impacta al hermano, al cuñado a los papas al vecino, entonces esto no lo podemos contabilizar exactamente, pero de que hay gente que es tocada alrededor de esa familia que se esta ministrando, es seguro", dice Artemio y Mayra Moreno.

Para este ministerio, la estrategia no debe quedarse solo en la ciudad.

"Estamos preparando un manual para que cualquier persona comience este plan de Dios para los policías de sus ciudades porque está tocando y esta cambiando la vida de los policías, de sus familias de sus hijos y de sus parientes, estamos viendo muchos milagros y estamos muy emocionados por lo que Dios está haciendo”, explica Moreno.

Honrando a la Autoridad es ya un programa reconocido por las autoridades de tamaulipas y más jefaturas permiten el contacto con sus policías.