En Colombia, al menos 246 personas murieron este año y casi dos millones resultaron damnificadas por las fuertes lluvias que afectan al país. La tragedia tendría un costo estimado de unos 5.000 millones de dólares. Varios ríos se han desbordado ocasionando inundaciones sin precedentes desde hace 80 años.

Muchas iglesias evangélicas han desaparecido. Las inundaciones en la costa atlántica (al norte) han provocado en los departamentos de Atlántico, Magdalena y Bolívar múltiples emergencias.

El Concilio de las Asambleas de Dios en Colombia, envió una circular a todos sus distritos para iniciar la recolección de ayudas y así asistir a miles de hermanos en la fe, que quedaron sin vivienda y lo perdieron todo.

Al mismo tiempo hay muchos pastores también damnificados. El poblaciones como Campo de la Cruz, Santa Lucía y Bohorquez, en el departamento de Atlántico, muchas iglesias evangélicas quedaron sumergidas en su totalidad por las aguas desbordadas del Río Magdalena.