Dos de las mayores agencias de ayuda cristiana del mundo están trabajando juntas para responder al terremoto de 6,3 grados de magnitud que azotó el martes a Christchurch, la segunda ciudad más grande de Nueva Zelanda, matando al menos a 65 personas.

El poderoso terremoto sacudió durante el ajetreo del mediodía, derrumbando edificios altos, dividiendo carreteras de concreto y derribando la icónica aguja de la torre de la Catedral de Christchurch, en la plaza central. El sismo del martes es uno de los peores desastres naturales del país.

Shine TV, cadena asociada de CBN News en Nueva Zelanda, informó que muchos vecinos se han ayudado mutuamente para afrontar las consecuencias del terremoto.

"Tomamos a nuestros vecinos y pusimos nuestros brazos sobre ellos y oramos” dijo John un residente de Christchurch. "Ellos no son cristianos. La gente estaba en shock por eso muchos se reunieron y oraron con ellos."

John pidió a los cristianos en todo el mundo para orar por el pueblo en Christchurch.

"Hemos estado en comunicación con nuestros colegas de Nueva Zelanda desde el terremoto", dijo el presidente de Visión Mundial Australia, Tim Costello. "Visión Mundial de Nueva Zelanda ofreció un apoyo práctico al Ejército de Salvación que está trabajando sobre el terreno."

Costello dijo que la principal preocupación del grupo por el momento son los niños de Christchurch que pueden estar traumados por el terremoto.

"Nuestra oficina de Nueva Zelanda se ha asociado con la agencia de crianza infantil Parents Inc. para distribuir una guía práctica para las personas que cuidan a los niños durante este tiempo", señaló Costello.

Hasta la fecha, 13 de los 14 funcionarios de la oficina de Visión Mundial en Christchurch han sido tomados en cuenta.

Este es el segundo gran terremoto que azota Christchurch en los últimos seis meses. En septiembre pasado, la ciudad sufrió un terremoto de 7,1 grados que causó un estimado de $3 mil millones en daños, pero ninguna muerte.

Se dice que al menos 100 personas, incluyendo estudiantes, están atrapadas bajo los escombros, según The Associated Press.

"Fue horrible. La gente estaba cubierta de escombros, cubierta por varias toneladas de concreto", dijo Natanael Boehm, un diseñador de páginas web y testigo del terremoto, a AP. Boehm agregó que él piensa que algunas de las personas han sido aplastadas por los escombros.

El aeropuerto de Christchurch está cerrado y las líneas eléctricas y de teléfono han sido derribadas. También algunas tuberías de agua explotaron, causando inundaciones en las calles.

Los equipos de rescate están trabajando para salvar a la gente de debajo de los edificios derrumbados.

"Es una escena de devastación total", dijo el Primer Ministro John Key, a 3 News New Zealand. "Bien podríamos estar presenciando el día más oscuro de Nueva Zelanda."

Fuente: Mundo Cristiano