Cada día se prueban nuevos y novedosos métodos para llevar el mensaje a los lugares más recónditos del planeta. En la selva peruana viven más de 4 millones de personas y un grupo de cristianos está capacitando nuevos misioneros “echándolos al agua”.

Cada año, jóvenes misioneros se embarcan en una singular aventura en la selva peruana a través del ministerio denominado “Misión a Bordo”.

Irma Espinoza, Misionera Capacitadora de Misión a Bordo comenta sobre el proyecto: “Misión a Bordo es una conferencia que se da dentro de una lancha, específicamente por el rio Ucayali. Está dada por la RAP, la Red Amazónica Peruana y bueno, se realiza en una forma que se da la teoría y la práctica, que es yendo por el río”.

Durante el viaje, el tercer piso de la motonave se convierte en una sala de conferencia donde expositores de larga trayectoria misionera comparten y debaten temas bíblicos sobre la misión de Dios, incluyendo anécdotas muy particulares sobre la práctica misionera.

Vocación misionera

La lancha “El Evangelista” parte del puerto de Pucallpa, y realiza durante su recorrido de una semana, visitas por varias comunidades nativas del lugar.

“Mientras vamos por el río, ellos van a tener la oportunidad de visitar algunos grupos indígenas y van a ver las necesidades, las limitaciones y la problemática por la que ellos pasan, y nosotros realmente no nos enfocamos sólo en la parte bíblica, espiritual, sino también en que ellos se den cuenta que hay necesidades en la parte de educación, en la parte de salud, en la parte administrativa, de comunicación con el mundo mestizo, no? Y muchas cosas así”, agrega la Hna Espinoza.

Misión a Bordo apunta a jóvenes con vocación misionera o a personas que ya están sirviendo en sus iglesias como misioneros.

Teresa Montoya, es una de las Misioneras participantes: “Me impactó mucho el hecho de llegar a cada tribu porque a pesar que era mi país, me sentí como que estuviera en otro lugar, no? y pude experimentar el hecho de conocer esa parte que para mi era desconocida no? el poder conocer las tribus y ellos nos recibieron con mucho cariño”.

Los promotores de Misión a Bordo sueñan con llegar a tener una influencia global, por la cual se promueva este tipo de misiones a otras etnias del mundo.

Fuente:www.MundoCristiano.tv