­

Un minuto con Dios

0:00

No dudo de que en algunas oportunidades de tu vi­da, ante un fracaso, se habrá escapado de tus labios aquella frase:
“¡Hice todo lo que pude!”

Sin embargo, nos dicen los psicólogos que son muy escasas las personas que hacen todo lo que pueden hacer.

Puede resultar una verdadera escapatoria el pensar que hemos hecho cuanto podíamos hacer; una esca­patoria para tranquilizar nuestra conciencia.

Cuando a aquel santo le preguntaron qué haría si volviera a empezar su vida, pudo responder con verdad:
“Lo mismo que he hecho hasta ahora.”

¿Podrías tú afirmar lo mismo con toda honestidad?

Vamos a ver si mañana haces algo más que hoy.

O al menos lo haces mejor que hoy.

“Todo lo puedo en Aquel que me conforta” (Filip, 4, 13).

Ya sabes muy bien que tú solo nada puedes hacer: “Sin Mí, nada podéis hacer” (Jn, 15, 5).

Pero que con Cristo, eres mayoría aplastante; Cristo siempre está a tu lado, siempre dispuesto a ayudarte, siempre tendiéndote la mano; basta que tú aceptes esa mano, la busques cuando la necesites, la aprietes cuando te sientas desfallecer.

Tambien podria interesarte

0 comentarios

Popular Posts