Los católicos romanos alrededor del mundo celebran hoy el miércoles de ceniza, el cual marca el inicio de la Cuaresma.
El período de 40 días de ayuno, el cual conduce a la Pascua, sirve como tiempo de reflexión y de arrepentimiento.
John Giuliani, de iglesia católica San Felipe, en Fort Mill, describe esta época como un “entrenamiento de primavera espiritual para los cristianos. Nos enfrentamos a nuestras debilidades y fracasos, y la ceniza simbolizan nuestros sueños rotos”, agrega.
Tradicionalmente, los fieles reciben en sus frentes una marca con la señal de la cruz hecha de cenizas. Esto les recuerda el capítulo de Génesis el cual dice, “Polvo eres y en polvo te convertirás”.
El papa Benedicto XVI dijo hoy que la Cuaresma es tiempo de conversión lo que significa rechazar la “fácil superficialidad”, que caracteriza nuestro modo de vida “que nos hace esclavos del mal”, cambiar el mundo, ir a contracorriente.